CAMPO DE BELCHITE: 15 PUEBLOS / 15 ELEMENTOS PATRIMONIALES
4. MOYUELA

 

Ermita de San Clemente, singular y monumental
Alejandro J. Ratia

 

Hay un grupo de ermitas de planta central que han llamado la atención de los historiadores del arte por el uso de ábsides semicirculares o poligonales en los cuatro lados, pues aunque en la época barroca son frecuentes los templos de planta central, presentan algunas peculiaridades. Todas pertenecen a la tipología de planta de cruz griega inscrita en un cuadrado y están cubiertas con cúpula. Su construcción es de mampostería, tapial y ladrillo, tan frecuente en la zona. Suelen presentar un pequeño vestíbulo cuyo volumen más reducido contrasta con los más rotundos del templo.

San Clemente de Moyuela, cercana al pueblo, edificio de piedra de sillería y mampostería, es un brillante ejemplo de ermita de planta de cruz griega, cúpula central y muros laterales en forma de ábsides semicirculares, de carácter singular y monumental.

En su disposición general sigue el modelo de la ermita de Belchite (obra comenzada a finales del siglo XVII y terminada en 1725), pero presenta la novedad de tener tres de sus lados semicirculares y no sólo en la cabecera como sucedía en la de la virgen del Pueyo. Podríamos suponer que ha recogido los principales elementos de ésta y otros de la de san Roque de Loscos.

Ermita de San Clemente

 

Las obras de la ermita de san Clemente de Moyuela habrían comenzado antes de enero de 1738 y según Juan Ramón Royo (1999) fue bendecida el 29 de enero de 1758. Las obras habrían durado, de acuerdo a lo que hoy conocemos, más de veinte años.

Su traza podría atribuirse al carmelita Fr. José Alberto Pina, natural de Moyuela y experto arquitecto, y su construcción a Miguel Borgas, maestro de obras que vivió en la localidad y a su hijo Miguel Borgas Blesa. (Carreras Asensio, 2004).

 

Otros interesantes ejemplos los encontramos en las ermitas de la Virgen del Pueyo de Belchite, la Virgen de los Dolores de Almonacid de la Cuba y de Letux, Santo Domingo de Lécera, Santo Sepulcro de Lagueruela, San Roque de Loscos, San Bartolomé de Santa Cruz de Nogueras, Santa Ana de Cucalón y San Marcos de Villafeliche (destruida), situadas en el territorio de la antigua Comunidad de Daroca y de las tierras de Belchite, que podrían conformar una ruta turística.

 

Ermita Barroca

El Barroco es, después del Mudéjar, el estilo de mayor trascendencia de Aragón, tanto por la abundancia de obras como por su fuerte personalidad. Este estilo artístico se desarrolla en el territorio aragonés durante los siglos XVII y XVIII.

Por otro lado los siglos XVI al XVIII, constituyen una época de esplendor del fenómeno de las ermitas y de las romerías.

Será el barroco el período histórico que configurará otro prototipo arquitectónico con iglesia de nave única, abovedada con lunetos, a veces con cúpulas sobre el presbiterio, y en casos de mayor importancia hasta con planta de cruz latina, con capillas laterales y con coro alto a los pies y tribunas.

El número de ermitas barrocas es el que, por razones históricas, ha llegado hasta nuestros días en mayor abundancia.

 

San Clemente de Moyuela

Pertenece así al ciclo de las ermitas barrocas de planta de cruz griega, con ábsides poligonales o semicirculares del sur de la provincia de Zaragoza, y es la más compleja y de mayores dimensiones de todas ellas.

Parte la planta de un cuadrado en el que se inscribe una cruz griega cuyos brazos están cubiertos con bóvedas de medio cañón con lunetos.

El espacio central y las esquinas están rematados con cúpulas con linternas, sobre pechinas.

Los extremos laterales de la cruz se completan con ábsides semicirculares que disponen de bóveda de gajos con lunetos ciegos.

El presbiterio está formado por otro ábside semicircular, precedido por un tramo recto con bóveda de cañón con lunetos. La cabecera se ilumina mediante vanos abiertos en los lunetos de la bóveda de cuatro paños radiales con lunetos.

 

Exterior

Es un edificio de piedra de sillería y mampostería, de grandes dimensiones y que supera el concepto tradicional de ermita para conformar una gran iglesia.

La volumetría exterior es muy expresiva con los tambores octogonales rematados con linternas, los ábsides y el parejo de machones, aristas y cornisas de ladrillo que flanquean paños de mampostería.

 

Fachada

La fachada, enteramente de piedra de cantería, tiene una portada en arco de medio punto, cuyas enjutas se decoran con temas florales en relieve, y en el centro, sobre la clave, una graciosa cartela encerrada en una cruz de brazos iguales; el entablamento es roto y liso y sobre él hay una hornacina entre dos pilastras coronada por frontón triangular, de ladrillo, partido con tres pináculos rematados en bolas.

 

Cubierta y Cúpulas

La cubierta es de bóveda de lunetos excepto en los ábsides, que es de gallones; en el crucero, que es de cúpula sobre pechinas con linterna y los cuatro espacios, pies y cabecera de las naves laterales, que es también sobre pechinas.

Cuatro cúpulas con sus correspondientes linternas rodean a la cúpula central, de mayor tamaño y con vanos.

Con las restauraciones de principios de siglo se actuó en fábrica y tejados, se repusieron las tejas de colores y en 1999 se rehabilitó la veleta que corona la cúpula central, rematada sobre la cruz con la figura del gallo, popularmente conocido como el “Gallico de San Clemente”.

Planos de cubiertas y cúpulas

 

Interior

Presenta tres naves con cúpula sostenida por cuatro pilares que presentan dobles pilastras en sus lados.

Plano de sección

 

Naves

Los brazos de la cruz, excepto el de la fachada, terminan en ábside semicircular; las tres naves separadas por pilares cruciformes decorados por cada lado con dobles pilastras y capiteles corintios. Tienen doble entablamento.

 

Capillas

Entre los diversos altares, en los ábsides laterales destacan dos capillas dedicadas a:

  • San Isidro Labrador, lado derecho decorada con
  • Cristo crucificado y Virgen del Pilar, lado izquierdo, y pinturas con escenas de la Pasión.

Siguen las obras de restauración en los siglos XX-XXI, actualmente en su interior, permitiendo en 2018, con motivo del 260 aniversario de la bendición de la ermita, la reapertura al público y al culto, tras 40 años cerrada.

 

Fotografías y planos:

José Abadía, Félix Bernad, Úrsula Heredia, David Sancho.

 

Bibliografía

  • Abadía Tirado, José

“Ermita de San Clemente de Moyuela. Singular y Monumental”.

Asociación Cultural Arbir Malena. Cuadernos Pedro Apaolaza, Nº 20. 2019

  • Abbad Ríos,

Catálogo monumental de la provincia de Zaragoza.

Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Instituto Diego Velázquez, Madrid, 1957.

 

  • Carreras Asensio, José María,

“Ermitas barrocas de planta de cruz griega, cúpula y brazos semicirculares en el área de Daroca”.

Calamocha, Xiloca, 32, 2004. http://xiloca.org/xilocapedia/index.php?title=Carreras_Asensio,_JoseMaria

 

  • Royo García, Juan Ramón

Evolución Histórica de Moyuela (Zaragoza) entre los siglos XVI y XIX”.

Asociación Cultural Arbir Malena. Cuadernos Pedro Apaolaza, nº 10, 1999.

 

– Más información en

https://moyuela-arbirmalena.com/ermita-de-san-clemente/

José Abadía Tirado

Septiembre 2022

    

Moyuela 6 octubre, 2022